piedra de ágata

El ágata es una variedad de calcedonia que se caracteriza por presentar sucesivos depósitos de diferentes colores o tonos. Es una de las piedras finas.

A diferencia de las piedras preciosas, existen infinidad de piedras finas con historias y virtudes increíbles.

Entre ellas encontramos el ágata , una piedra maravillosa con mil caras.

La ágata, que se encuentra en muchas joyas, se asocia principalmente con la plata o el oro blanco. De hecho, el tinte gris suave y luminoso de estos metales preciosos permite resaltar la piedra.

De hecho, el ágata evoca abundancia y alegría y a menudo se asocia con diosas y dioses . Para los celtas, esta piedra evocaba tanto a la diosa de la muerte como a la de la fertilidad. En cuanto a los romanos, asociaban el ágata con la diosa del amanecer. Cualesquiera que sean las civilizaciones, el simbolismo del ágata estaba vinculado a la divinidad.

El ágata forma parte de la amplia categoría de piedras finas y más precisamente pertenece a la familia del cuarzo y, en particular, a un tipo de calcedonia.

los beneficios

Cada tipo de piedra fina tiene su simbolismo y beneficios. Las ágatas son gemas con propiedades y virtudes sorprendentes.

De hecho, en el día a día, las ágatas aportan equilibrio y armonía al cuerpo y a la mente .

A menudo utilizada como piedra de anclaje , tiene propiedades calmantes y permite liberarse de bloqueos energéticos.

Ágata promueve la clarividencia, la concentración y la confianza en uno mismo al usuario.

Los beneficios del ágata también se extienden a nivel físico protegiendo contra diversas dolencias cotidianas, actuando sobre la circulación sanguínea y la epidermis.

Además, también ayuda a aliviar los problemas respiratorios y reequilibrar la energía sexual.